Una charla reparadora [Kyara]

Hoy no tenía clases así que había decidido irme un rato a la mansión, seguramente los demás estarían en la Universidad, lo que me dejaría a mí un buen de tiempo a solas que no me vendría mal.

Como no sabía qué hacer me dirigí a la cocina y decidí preparar algo de comer, aunque la comida humana no nos hacía bien ni mal, a mí cocinar ciertamente me relajaba y me conectaba con esa parte que no deseaba perder de mí misma: mi humanidad.

Saqué lo necesario para preparar una lasagna y comencé a tararear mientras acomodaba las cosas en la barra. En eso estaba cuando escuché que la puerta de la entrada se abría. Me pregunté quién sería mientras prendía la estufa y ponía a hervir agua para la pasta.

Entré a casa maldiciendo como de costumbre. Eché algunas groserías en ruso para que así no sonasen tan vulgares, ya que Alexander ya estaba harto de soportar mis malos modales, además así podía recordar un poco mis días de humana con André.

En eso oí ruidos en la cocina, haciendo que mi curiosidad por saber quen andaba allí me obligó a acercarme.
-Hey Aly- dije asomandome mientras me arreglaba un poco el pelo para verme levemente más presentable.

Nada más escuchar esas groserías en ruso y esa voz me bastó para saber de quién se trataba. No pude evitar sonreír mientras mi hermana aparecía y se arreglaba un poco el cabello. De mis hermanas, la más reblde y alocada era Kyara, pero cómo la quería a la condenada y a pesar del carácter y la personalidad tan distintos que teníamos, habíamos desarrollado una amistad tan fuerte que ahora nos considerábamos en verdad hermanas.

- Hola linda ¿por qué maldiciendo desde tan tempranas horas? - le pregunté mientras me acercaba a ella y le daba un beso en la mejilla.

-Que? no vas a abrazarme?- dije riendo mientras la rodeaba con mis brazos con fuerza y apoyaba mi cabeza sobre su hombro un momento. La impregnaría en mi olor a tabaco y alcohol, pero no me importó. -Hace rato no te veía Aly, ultimamente ya no me topo con nadie de esta casa- dije desde su hombro y luego me separé riendo un poco.

-Tenemos tanto que hablar- le dije echando un suspiro y sentándome sobre la mesa.

Kyara me reclamó por no abrazarla y yo reí mientras la rodeaba con mis brazos afectuosamente. Ella apoyó su cabeza en mi hombro y yo pasé una mano conciliadora por su rubio cabello. De las cuatro Huntington que éramos, yo había adoptado la figura de hermana mayor y me preocupaba mucho por mis hermanas, a las cuales adoraba.

- Lo sé, deberíamos de hacer reuniones más seguido, ya parece que no somos familia - respondí a su comentario completamente de acuerdo con ella, ya hablaría de ello con alex más tarde.

Ella fue a sentarse sobre la mesa y yo la miré mientras comenzaba a preparar la salda para la lasagna.

- Bueno, pues sabes que soy toda oídos, cuéntame qué ha pasado últimamente en tu vida, linda

Estiré mi mano y metí mi dedo indice en su salsa para luego lamerlo... "delicioso", Aly siempre tan hábil en lo que yo realmente era un fiasco.
-Ok... por donde empezar....- murmuré despacio aún con el dedo en la boca, pensando en como resumir mis vivencias de éste último tiempo.

-Hay uno nuevo- dije refiriendome a Josh. -Esta guapo, ya lo probé y en la cama sube muchos más puntos-. dije quitándome el dedo de la boca -además es vampiro- . añadí. Perfecto, sonaba como buena introducción.

Observé como Kyara metía eld edo en la salsa y yo sólo seguí preparando la carne en el sartén. Escuché atentamente a todo lo que me decía. Había otro, eso siempre quería decir que se había involucrado con otro chico, cosa que no me sorprendía para nada, tratándose de ella. Kyara era la más...liberal de todas nosotras y casi siempre tenía a un chico distinto en su cama.

- Bueno, en resumen, has encontrado a un chico perfecto para ti, vampiro guapo y bueno en la cama - dije riéndome un poco - pero noto que algo te preocupa, no puedes engañarme Kyara Huntington...así que dime ¿cómo se llama ese guapo vampiro que tanto te gusta?

Gruñí al oírla, solo porque tenía razón. -Odio ese maldito sentido de intuición que tienes- dije rodando los ojos y acomodando una pierna sobre la otra para empezar las confesiones.

-Joseph, así se llama y me molesta que sea tan parecido a mí... lo hace ver como " un buen compañero"- Quise decirlo todo rápido para que no me interrogara de por medio y se olvidase un poco de los detalles de mis palabras.

Me reí cuando Kyara dijo que odiaba mi intuición. La verdad es que yo era muy perceptiva y cuando se trataba de mi familia, con la cual llevaba toda la vida, no podía evitar darme cuenta de cuando alguno estaba mal o le pasaba algo.

- No la odias, de hecho te gusta saber que hay alguien que te va a escuchar sin juzgarte - le repliqué mientras le bajaba un poco a la flama. Estaba cortando un poco de cebolla cuando oí el nombre del chico que la traía así, y debido a la sorpresa me corté el dedo - ¡Ouch! ¿Joseph? ¿Rubio, alto y con actitud altanera?

-Tal parece que lo conoces- dije al ver su dedo lastimado. Lo bueno de ser vampiro es que ese tipo de accidentes no significaban nada, asi que no me alarmé para ayudarle.
Así que después de todo Aly conocía a Joseph... aunque claro, considerando ambos carácteres... que se haya metido con el no era una posibilidad, sería como mezclar agua con aceite, a Aly no le llamaban la atención ese tipo de chicos locos que a mi sí.
-Algo que contarme del involucrado en cuestión?- alcé una ceja confusa.

Dejé el cuchillo en la mesa y me metí el dedo a la boca, chupando la herida que no tardaría mucho en cicatrizar. Sabía que esa reacción no iba a ser buena pero dudaba mucho que Kyara desconfiara de mí, además de que Joseph no era mi tipo de chico, y yo sólo amaba a una persona en este mundo.

- Sí, lo conozco, el otro día estaba en el lago y él apareció, me invitó a comer, pero la verdad no pasó nada, simplemente me agradó, eso es todo - le platiqué la versión resumida a Kyara, sabiendo que no había nada que ocultar - pero ahora uqe sé que está contigo, hay algo que quisiera decirte, hay algo en él que no me da buena espina Kya, así qeu ten cuidado con él...por cierto ¿sabes de qué clan forma parte?

-Clan?- la palabra me dió vueltas en la cabeza. -No tenía idea que formara parte de algún clan... ¿osea que son mas?- al parecer mi hermana estaba mucho más enterada que yo, de todos modos no era muy extraño, yo siempre vivía en la luna y no tenía idea de nada que no tuviese que ver con diversión y esas mierdas.

Me sorprendió mucho que Kyara no supiera que Joseph formaba parte de un clan, la volteé a ver por unos segundos y luego regresé mi mirada a la carne que ya parecía haberse cocido así que le agregué la salsa de tomate para luego comenzar a revolverla.

- Así es, me habló de su clan y me dijo que sólo estaban unidos por diversión, no es como nuestro clan que parece más una familia, pero de seguro sabes cómo se apellida ¿no? - pregunté mientras me iba a sentar al lado de mi hermana en lo que la pasta terminaba de cocerse.

¿Su apellido? no tenía ni la más mínima idea de cual era, pero es que bueno... nosotros no conversavamos mucho que digamos, la verdad nosotros íbamos directo a la acción. Recién me daba cuenta que realmente no sabía nada de él.
-No conozco nada de él más que sus dones en la cama - dije encogiendome de hombros restándole importancia.

No pude evitar soltar una carcajada al oír lo que Kyara decía, acerca de lo que conocía de Joseph, sólo sus habilidades en la cama, si así era entonces yo lo conocía un poco más que ella, pero no tan profundamente.

- Ay Kyara, sólo eso te pasa a ti, pero si de verdad te gusta deberías de interesarte más por otras cosas que sólo el sexo - le repliqué mientras comenzaba a colocar la pasta en el recipiente engrasado

-Tampoco he dicho que me guste!!!- hice la pequeña distinción - solo dije que ... va ya ni se que dije, pero lo paso bien con él es todo-. Me crucé de brazos y miré con cuanta delicadeza Aly cocinaba.
-Asi que te da mala espina?... pregunto solo por curiosidad, no vayas a creer que me interesa más de la cuenta he? - añadí mirando en otra dirección.

Miré a Kyara con una ceja levantada y una expresión burlona en mi rostro. No, se notaba que no le gustaba, le era bien indiferente de seguro.

- Bueno, si sólo te la pasas bien con él entonces no creo que sea necesario que sepas más de él ¿no? eso sólo hará que te guste y tú no quieres eso ¿cierto? - pregunté con un poco de sarcasmo en mi voz y una sonrisa en mis labios.

Coloqué la primera capa de pasta y encima fue vertiendo poco a poco la salsa hecha con la carne y el puré de tomate, después lo rocié con una capa de queso mozarella.

- Pues mira, siento que hay muchas cosas incongruentes en su forma de ser...además estoy segura de que me mintió en algunas cosas

Perfecto Kyara, la única vez que te interesas en conocer a alguien más allá del placer que te de en la cama, resulta tratarse de un lunático. -Asi que te ha mentido...- bufé jugando con mis pies en la mesa, balanceandolos de un lado a otro.
-Solo curiosidad con él Aly, es todo, a poco pensaste que querria casarme con él? dios!!! como si no me conocieras-

- No lo sé Kya, a lo mejor son sólo imaginaciones mías, pero sabes que cuando se me mete algo a la cabeza ya no me lo puedo sacar...sólo diviértete y no te involucres demasiado ¿vale? - le pedí a mi hermana mientras negaba con la cabeza y metía la lasagna al horno. Le puse 20 minutos y fui a sentarme al lado de mi hermana - yo sé que no vas a casarte con él...o con alguien, pero no está demás tener algo de cuidado.

Imaginarme a Kyara casándose se me hizo una imagen algo rara, de hecho no me imaginaba a ninguna de mis hermanas casándose...y yo, mucho menos.

-Siempre tan maternal ¿he?- eché una risita mientras apoyaba los brazos en la mesa y me inclinaba hacia atrás un poco. Suspiré mirando el techo y luego cerre los ojos en señal de agobio. -y que tal si empieza a gustarme?... digo, empezar a creer que me gusta verle con frecuencia y quizás disfrute de su compañia?- volví a reirme en la misma posición. -solo es un caso hipotetico Aly, ya me conoces- bufé y volví a dirigir mi vista a ella quien parecía concentrada en su lasagna.

Me alcé de hombros cuando dijo que yo era maternal, era una parte de mí misma que no podía negar, cuando era humana deseaba casarme y formar una familia, pero cuando me convertí, tuve que aprender que mis sueños no podrían ser. Así qeu cuando llegaron mis hermanas pues, no pude reprimir mis instintos.

- Sabes que no puedo evitarlo, si soy así es porque las adoro - le dije mientras ella suspiraba y miraba al techo, al oír su casi hipotético yo sólo me reí, eso ya no era un caso hipotético, pero bueno, mejor no decir nada y dejar que las cosas fluyan como deben - Bueno, supongo que si empieza a gustarte más, no tendrá nada de malo en tanto veas que las cosas van bien...y quizás deberías averiguar algo más de él, no sólo como es en la cama.

-Eso crees? bueno pero no va al caso- dije mirando lo que parecía una apetitosa cena, aunque claro en situación prefería algún excursionista perdido o algo así.
-De todos modos estoy lejana eso, detesto su forma de ser... que no le importe nada y sea un mujeriego empedernido que se cree el rey del mundo "hey soy Joseph y todas están a mis pies"- le imité con voz graciosa y volví a reír. Mis risas se detuvieron al darme cuenta de un pequeño detalle... con esa descripción, no hacía más que describirme yo misma pero en versión masculina.

Negué con la cabeza al oír a Kyara, si no venía al caso, no habría preguntado nada. Yo me reí y comencé a sacar algunas cosas del refrigerador, incluida una botella de vino tinto, mi favorito. Me serví una copa y le ofrecí a mi hermana.

No pude evitar mirarla de manera significativa cuando describió a Joseph, pues claramente estaba describiéndose a sí misma, y ella había notado ese detalle.

- Bueno cariño, hay quién dice que todos odiamos ver reflejados nuestros defectos en otras personas y en ese sentido, te topaste con la horma de tu zapato linda - le dije dándole un trago al vino

Me ofreció una copa de vino, pero yo en cambio cogí la botella completa y le di un primer sorbo una vez comenzaba a hablarme, dándome a entender que también había captado el mismo detalle que yo acerca de la descripción.
-Bueno bueno.. tal vez nos parecemos un poco, pero solo un poco. Soy mucho más simpática y graciosa, no como él que es un engreído arrogante- rodé los ojos y decidí ponerme de pie, ser hiperquinética era otra de tantas características mías.

Kyara bebió directamente de la botella y yo negué con la cabeza, a veces me preguntaba si mi hermana podría ser un poquito más decente, pero realemente no me importaba mucho, así la adoraba.

- Pues sé que probablemente quieras golpearme después de lo que voy a decirte pero a mí me parece que Joseph es bastante agradable y simpático, me hizo reír mucho mientras comíamos, claro que estoy de acuerdo contigo al decir que es un arrogante, sí que lo es - le respondí a mi hermana y le di un trago a mi copa - pero como tú veas, Kya, al fin y al cabo no estás interesada en él ¿no? qué más da como sea en verdad - añadí a sabiendas de que mi hermana no sólo lo quería para acostarse con él